jueves, 16 de septiembre de 2010

CRISIS DE GOBIERNO TRAS EL 29-S

Escribir hoy Zapatero en el buscador Google debe ser una pesadilla para las filas socialistas. El motor automático de búsqueda da como primera opción ''Zapatero Berlusconi'', sin duda por la fama que alcanzó el plantón que el cavaliere dio al presidente en Roma como vendetta protocolaria. La segunda opción es ''Zapatero dimisión'', y no mucho más abajo encontramos ''Zapatero Elche'', en referencia a aquel mitin en 2009 en el que el mesías aseguraba que no habría reforma laboral que perjudicara a los trabajadores.

Ciertamente, José Luis Rodríguez Zapatero está más quemado que la pipa de un indio. Y su pasarela de otoño/invierno es larga y aún no ha empezado a caminar. Agosto nos dejó más de 60.000 nuevos parados, un pequeño barranco que vaticina todo un precipicio para septiembre, octubre y noviembre. Para finales de este mes su primera huelga general (en España las huelgas generales tienen apellido de marqués: de González, de Aznar...) deteriorará aún más el azul oscuro de la bancada gubernamental.

A principios de octubre la política nacional se centrará en Madrid, donde Trinidad Jiménez y Tomás Gómez, con o sin Rubalcaba por medio, acabarán por dividir a un PSOE que, ya totalmente separado en ideología del PSC catalán, está en plena ebullición. Trinidad tendrá que salir del Gobierno pierda o gane, porque hasta ahora habíamos visto a ministros pidiendo el voto pero no un voto propio. Aunque en España cierto es que lo inédito se hace normal una vez es público.

Celestino Corbacho, bien por su posible candidatura en las elecciones catalanas bien por el ladrillo de parados que pesa sobre sus espaldas, también trae de cabeza al presidente. Ya son dos las personas nominadas al Oscar: ''oscar-gasteis mi Gobierno''. La pregunta es: ¿Quién es hoy lo suficientemente fiel a Zapatero en sus peores y probablemente últimos momentos, y sin haber estado en el Ejecutivo?

Ya no quedan cartas en la baraja.

lunes, 13 de septiembre de 2010

SALVAJES, PERO CONSIDERADOS

Lo que voy a contar es una tontería. Pero es una minucia fascinante. Hoy he dado de comer a mis perros. Ya lo echaba de menos porque llevaba tres meses sin hacerlo, y me ha sucedido lo de siempre: que han comido con mucha delicadeza de mi mano.

Me explico. Dos mastines españoles, a la hora de hincar el diente, no se distinguen mucho de dos cerdos, como tampoco distan mucho sus colmillos de los de un león. Y sin embargo, ahora que me fijo, no son tan salvajes como las bestias de marras.

Il faut hacer la prueba. Lanza un pedacito de mortadela al aire y tu perro se lanzará como si no hubiera comido en su vida, atrapando la presa con unos colmillos asesinos que no pondrán reparo en el estilo de la ingesta. Pero si ese pedazo de mortadela se lo das con la mano y esperas a que él lo coja, saborearás el placer de que tu perro module su hocico para no desgarrarte las yemas de los dedos.

Es como si antepusiera el recato a las ganas de comer. Y eso es, simplemente, impresionante. Al igual que a los humanos nos gusta separar el perejil o un pelo advenedizo de nuestra sopa, los perros saben perfectamente apartar su presa del contorno de la mano que le da de comer. Ahora entiendo a mi padre cuando acusaba a mi antiguo perro Draco. ''Éste perro sabe latín''. En efecto, es cierto, y yo añadiría que los mastines españoles también están muy puestos con el refranero, pues siguen a patas juntillas aquello de ''no muerdas de la mano que te da de comer''.

martes, 7 de septiembre de 2010

SANTA PAULA

Ya le he apuntado a Candy que copio idea y copio sentimientos. Ella quizá no lea esto, porque el ascetismo y el aislamiento forman ahora parte de su vida.

La conocí tarde, ya en primero de bachillerato, y dos años después, cuando me fui a Canadá, desapareció de mi agenda de contactos asiduos; pero nunca dejó de ser mi amiga. Ahora que nos deja, siento como si me lo hubiera robado todo. Pero en su tiempo ya me lo dio todo, de modo que quién puede combatirle a la vida que todo lo que nace, o sea lo que nos dan, muere, o sea nos lo quitan.

Paula me dio la mejor feria de mi vida, la de 2004. Me dio también la Nochevieja más increíble de mi existencia, la de 2004/2005, la de la licencia especial de Ramón García, ya saben, ''feliz 2005, premio''. Me dio, cómo no, los mejores cambios de clase en el colegio, y me ofreció los más ricos besos que un hombre de mi edad pudiera recibir. Paula me dio los mejores regalos, y las lágrimas más sinceras. Me dio los tirones de brazo más elocuentes, sin necesidad de abrir la boca para dirigirme. Me dio ánimos, me dio ilusión y me ofreció cada día su amistad. Creo que es lo único que no he conseguido perder.
Para todo esto que me dio hizo falta dar el primer paso. Pero el primer paso a los 17 años siempre es un paso fácil, porque no hay preocupaciones, tabúes ni matices: en el amor, todo es blanco o negro, no hace falta pensar porque no hay nada que pensar. Y los amigos actúan como mediadores, algo que desaparece totalmente al entrar en la universidad. La autopista al éxito tiene cuatro carriles.

No sé si ha tomado la decisión correcta, eso el tiempo lo dirá, como siempre. Pero es su decisión, y se ha ganado mi apoyo.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

DE APOYOS Y AVALES

Ya ha salido la autobiografía de Tony Blair. Bueno, él dice que la ha escrito él mismo, pero desde que todos hemos visto la película 'El Escritor', nos caben muchas dudas. En todo caso, de haber necesitado un negro, ahí habría estado Blair, contándole todo a su escriba a un alto precio. Por otra parte, teniendo en cuenta que el ex premier británico ha dicho que sus honorarios editoriales han acabado en una ONG, entonces no sé de dónde habrá sacado el dinero en caso de que haya tenido que pagar a un negro que le hiciera el trabajo, máxime cuando aún tiene que pagar la hipoteca de una nueva casa en el centro de Londres.

La prensa española no ha tardado en buscar citas pertinentes en el libro de Blair. Una que nos afecta muchísimo es una confesión del ex presidente español José María Aznar al político escocés, a quien le dijo que en España sólo el 4% de los ciudadanos apoyaba la guerra de Irak. Me pregunto si esto es relevante, o si es relevante considerar siempre la opinión de un pueblo para determinar la gobernanza. ¿A quién le apetece que Zapatero tome las medidas anticrisis que está tomando desde hace unos meses? A nadie. Pero tiene que hacerlo, sobre todo después de los destrozos a los que nos ha llevado en sus dos legislaturas. Y ningún español lo querrá, pero ya digo, tiene que hacerlo.

Tomar en cuenta siempre la opinión del pueblo para medidas que escapan al programa electoral iniciático significaría tener que pensar en una reforma de la Constitución, para que todo se decidiera en referendum, como en Suiza. La mejor manera de evaluar las acciones, decretos y difíciles decisiones de un gobernante llega en las elecciones, con las urnas. El verdadero desafío para cada uno de nosotros es garantizar que nuestros amigos, vecinos y conocidos se acuerden de sus quejas, de sus descontentos, a la hora de la verdad.