No podemos competir con la izquierda en demagogia porque ahí se mueve como cerdo en la mierda. Fíjense que cuando empieza una guerra, sea ésta en Ucrania o en Gaza, la izquierda radical -pero también algunos en la moderada-, para huir de la responsabilidad de buscar a sus provocadores, centra sus críticas en las ganancias de la industria armamentística, olvidando un detalle esencial: no es la industria armamentística la que declara guerras, sino los Estados.
Cuando dos empresas entran en conflicto, se ven en los juzgados. Si son dos Estados o, como es el caso de las guerras modernas, un Estado el que entra unilateralmente en otro invadiéndolo, entonces hablamos de guerra. Y esta tiene consecuencias para todo el mundo, no solo para el Estado en cuestión. En el diario progresista Süddeutsche Zeitung leía el otro día que la gran inflación se 2022 se debía, entre otros factores, a la interrupción de las cadenas de suministro con causas tan nimias como la falta de granjeros en Ucrania que se ocupen de ordeñar vacas porque los hombres son llamados al frente.
La inflación, causa del capitalismo? Canal Red, estais leyendo esto? Sois vosotros y vuestra obsesión estatista.