jueves, 8 de febrero de 2007

BICENTENARIO ROJIVERDE

Dos centenarios, un bicentenario. El blog de hoy va dedicado a dos aficiones, a la del Betis y a la del Sevilla. Se ha notado a lo largo de estos años la venida y llegada de los centenarios de ambos clubes, y actualmente estamos viviendo -media ciudad emocionada- el centenario del equipo de Heliópolis, el Real Betis, mi equipo.


Lo que más ha ayudado a que esperáramos con impaciencia el centenario de ambos equipos ha sido la publicidad que se le ha dado a sendos cumpleaños, tanto desde la misma entidad como desde el concejo de la ciudad, haciéndose eco en otros grandes eventos como el de la Feria de Abril.


Pero detrás de esa felicidad, de ese orgullo que enaltece a tantos forofos del fútbol de Sevilla, están los sentimientos de dos equipos rivales que a veces nos hacen brotar adrenalina de tanta alegría. Son desgraciadamente pocas las imágenes de que nos llegan de amistad y concilio entre ambos equipos, seguramente porque vendan menos que una imagen que muestre rivalidad, imágenes tales como dos aficionados, uno bético y otro sevillista, dándose un abrazo en un partido de hace dos años que quedó en tablas. Audiovisual sport decidió, muy inteligentemente, acabar con un encuadre cerrado de ambos personajes achuchándose el uno al otro. Yo me tomé la molestia de inmortalizar un paisaje hace dos semanas, mientras paseaba al perro, que se veía desde la avenida del Piscinas Sevilla, justo en el 6º piso de unos bloques del lugar:


Creo que la foto no necesita más explicación: Una familia, dos aficiones. Esta es la más pura expresión de fraternidad entre dos aficiones que a veces llegan a convivir en una misma zona. Bueno, es que de hecho Sevilla es una misma zona para ambos equipos. Las dos entidades están asentadas en la misma ciudad, Sevilla, nuestra ciudad.
La emoción está servida este sábado noche, en el Ruiz de Lopera, ensayo de lo que puede ser el mayor partido del año -28 de Febrero, día de Andalucía- cuando ambos equipos se jueguen su pase a semifinales de Copa, un pase que paralizaráde ilusión a toda la ciudad.

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