martes, 20 de abril de 2010

LUNA DE MIEL CON LA MUERTE

Lo peor de la muerte no es que desaparezcas, o que no sepas nunca qué hicieron con tu cuerpo, que no satisfagas la curiosidad de saber quién fue a tu funeral, que desconozcas el destino de tan raro viaje o el precio del billete, incluso si a éste se aplica el descuento del carné joven, en su triste caso.

Lo peor es su raíz femenina. Muerte. La sóla pronunciación provoca una ligera sonrisa forzada a cuenta de las dos 'es'. Para los hombres, digo, es una desgracia especial, porque se trata de un ente femenino que nos atrapa para llevarnos a algún sitio, o, por lo menos, y esto es seguro, quitarnos de otro. Para más inri, se trata de algo más eterno que el matrimonio. A decir verdad, la muerte es la clara enemiga de la libertad, porque nadie elige morir; también es cierto que nadie escoge nacer, como tampoco escogemos a nuestros padres, la cultura que vamos a tener, el entorno...

Los ingleses fueron los más listos: 'death'. Pronunciado tez, el hecho se relativiza. También se suaviza. Tez es el ruido que hacemos al cortar nuestra tira de papel higiénico, el crepitar de una hoguera, la leve risa de un amor que se te declara con los ojos, y todo lo provechoso que podemos hacer en este corto tiempo sobre la Tierra.

3 comentarios:

merce dijo...

Anda, Falete, cambia la M por la S...

Anónimo dijo...

Eso, F. y luego añade "memez " que rima con "tez " !

Falete dijo...

Estais compinchadas?