Esta semana hay elecciones en España y ya me han escrito dos clientes alemanes con textos de periódicos que comentan la actualidad hispana. Lo hacen porque saben que me gusta trabajar con ellos leyendo la prensa y comentando la política mundial.
Hoy mismo, una de estos clientes me ha pasado un recorte del Heilbronner Stimme -la voz de Heilbronn, cabecera de referencia regional del que es el distrito o provincia más rica de toda Alemania. La prensa regional alemana es la favorita en el país de Lutero, al contrario de lo que suele pasar en España, donde triunfan periódicos de tirada nacional con suplementos locales de pocas páginas. El problema de la prensa provincial alemana es que, sin excepción alguna, da un tratamiento progre y tergiversado y climatista (me acabo de inventar el término, pero suena bien) a la información nacional e internacional.
Esta clienta, como digo, me ha pasado un recorte del Stimme en el que se advierte de la posibilidad de Pedro Sánchez de perder las elecciones. Y todo ello, citando el texto, pese al buen rumbo de la economía, que va ''wie geschmiert'' (como huntada, parafraseando mal al ''como una moto'' de Sánchez). El periodista se esmera en relatar al lector desprevenido que España tiene ''la inflación más baja de toda la Eurozona''.
Nada de la suelta de violadores, del caso del tito Berni, de los líos con Marruecos, de la mentira de los peajes o de los pactos con sediciosos y proetarras. Esto, a un periódico provincial alemán, no le interesa lo más mínimo, porque va contra sus genes socialdemócratas propensionistas.
El Stimme entrevistó una vez al fundador de un grupo de Facebook, ''Du bist aus Heilbronn wenn (unzensiert)'' (eres de Heilbronn si -no censurado-). En la entrevista se hacía hincapié en el carácter liberal y anticensor del fundador de la página, Dennis Decker. Al preguntársele por qué le pareció importante crear un grupo sin censura, Decker respondió que una vez accedió a otro grupo de Heilbronn en Facebook preguntando si ''alguien conocía a un peluquero que trabajara de forma privada'' (en alemán, decir trabajar privado es un eufemismo para trabajar en negro) y le borraron el comentario rápidamente, algo que dejó al pobre Decker desolado.
Eso llevó al heilbronnés a crear su propia página, en la que, según admitía en la entrevista, sí tuvieron que ''echar a algunos primeros miembros, por su pensamiento de derechas''. El censor anticensura. Qué es el pensamiento de derechas y, sobre todo, quién es el juez para determinar el límite entre un pensamiento de derechas y una leve discordancia con el mainstream verde y progre? aparentemente, el juez es Dennis Decker, al menos en su grupo.
Huelga decir que el entrevistador del Stimme, Christoph Donauer, no cuestionó la hipocresía del entrevistado. En la burbuja progre y climatista en que vive Alemania, la burbuja provincial te da el azúcar informativo que quieres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario